Dentro de estas pocas y (muy)estimadas líneas quiero exponer lo poco que tengo que pensar y lo mucho que tengo que hacer... porque pensar no sugiere jamás que lo harás, y viceversa... a veces hacer algo no sugiere que lo hayas pensado previamente. Es el "antes y el después" de "algo" lo que nos marca, y quiero aclarar ya mismo que de lo que hablo es del dolor. Sí, el dolor.
Pensar que todo lo que he vivido(más bien un cuarto de década) me sirvió para convertirme en el mejor testigo de mis vivencias y la de medio mundo, me hizo pensar y reflexionar más de un millón de veces el "como hacer los movimientos correctos", el "como mejorar", el "como lograr una meta", todo, todo, para demostrarme que en definitiva a veces... el destino es una locura caprichosa.
No creo que sea casualidad más de mil cosas, las casualidades no existen, lo supe siempre, y nunca de creer en ello, siempre me pregunté algo como todos.. "¿De donde viene toda esa fortaleza que subyace en la nada para abrazarnos en los momentos más complicados de nuestro existir?", aun no he llegado a esa respuesta. Ejemplifica lo que desees, justifícalo todo, dá explicaciones del acontecimiento, más si bien pensara uno que todo está aclarado por medio de la razón más puramente cognitiva estamos sobre el control absoluto del entendimiento de un dilema pero... muy muy muy muy dentro tuyo preexiste ese micro momento de duda, ¿dudas porque tu corazón duda? ¿dudas porque tu alma no te deja dormir? ¿dudas porque tenes una sobrecarga de emociones que no puedes lograr controlar? No lo sé. Simplemente es una duda que nace... de la nada como la energía universal que se almacena, se retiene y se expulsa cuando es debida o se marcha cuando no es solicitada transformándose en la más pura paz, la más armoniosa canción que jamás hayas escuchado de una voz mitad ángel, mitad demonio...
¿Por qué seguís entonces? ¿Para qué persistir en la batalla perdida en apariencia? ¿Por qué tus esperanzas resucitan 3 veces más rápido de la que las pierdes? ¿Por qué...? Mi cabeza es un vaivén de ideas que se computan a millón de ciclones por segundo y seguís pensando aun cuando estás bajo la vigilia de Morfeo. El dolor es una realidad tanto como la fortaleza, y ambas se necesitan la una de la otra... podríamos decir que deberíamos dar mil gracias todas las mañanas de vivir en este diminuto universo dual, porque así como nos duele podemos ser fuertes, así como lloramos, reímos, así como nos caemos, nos levantamos, así como todas esas veces en que la vida nos supo a esa amargura tan pero tan áspera... podemos sentir el aroma más dulce de las cosas más simples y hermosas que nos regala las oportunidades más descabelladas que surgen como por arte de la magia natural de existir simplemente...
He conocido el dolor en una faceta muy tranquila a mi punto de vista, no he transitado muchos grandes dolores pero los que me tocó probar fueron solo para apreciar el error y la gloria de ser yo mismo. De ser ese pixel entre miles de millones de tonalidades de colores en una paleta...
Así son los sentimientos y su intensidad para mí, es mi capacidad de apasionarme por ello. Sean cosas o personas. Y seguiré siendo tal cual soy, con el plus de agregar más experiencias a mi desfachatada forma de hacer las cosas y lograr, a golpes de martillo, malear mi ser para fortalecerme aun más...
Por ello, ella es mi temple y yo su guardián, es mi espada y yo su escudo, es mi sentir y yo su pensar, es mi potencial todo y yo... su absoluta nada.
Sé que existe esa puerta que da a ese paralelo futuro donde estaremos juntos, estoy más que seguro, aunque habrá que luchar muchas batallas para derrotar al único enemigo más poderoso que tengo: YO. No tengo otra forma de hacer las cosas más que luchar, solo eso tengo y nada más por el momento. Solo tengo este papel con su dibujo y el recuerdo de sus ojos, solo eso tengo por el momento.
¡¡¡No podría estar más emocionado ni más apasionado!!!
¡PASIÓN ES LO QUE TENGO!
PD: Épico
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